Desde muy pequeña he tenido claro que mi sueño era ser profesora, pues siempre me ha gustado enseñar y ayudar a los demás. Por ello ser profesora era mi primera opción y cuando llegó el momento de las prácticas desde luego reafirmé que esto es lo que quería hacer por el resto de mi vida.

Las prácticas de magisterio son una de las experiencias más bonitas que he tenido, pues he disfrutado, reído y llorado en muchos momentos, pero antes de relatar mi experiencia os contaré un poco del colegio donde realicé mis prácticas.

El colegio se llama CEIP Perú, un colegio que se encuentra en el distrito de Carabanchel, concretamete en la calle Baleares, 18. Este cuenta con una oferta educativa que abarca desde la guardería (0-3 años) hasta la educación primaria (6-12 años). Además, el colegio también cuenta con la ayuda de diferentes organizaciones que dan talleres o clases a los niños y niñas después de las 14:00 h (que es el final de la jornada lectiva) hasta las 19 u 20 h, para que así los padres de estos puedan compaginar su jornada laboral con los horarios de sus hijos. 

Por otra parte el colegio tiene numerosos proyectos en los que trabaja y siempre busca incluir a toda la comunidad educativa en ellos. Además los profesores siempre están muy implicados con cada uno de sus alumnos, y todo esto lo podemos ver reflejado en su página web, por eso, al verlo me decidí por realizar mis prácticas en este colegio.

Cuando llegué al colegio me indicaron que mi tutora sería la profesora de 5ºA de primaria. Ella se llamaba Yolanda y las clases que impartía eran Lengua y Matemáticas. En un principio, no me gustó mucho tener que ir a un curso de niños tan mayores, pero cuanto más tiempo pasaba con ellos, empecé a agarrarles muchísimo cariño y por otra parte como me tocó impartir las clases de Lengua y Matemáticas, se me hizo más fácil acercarme a ellos, pues son dos asignaturas que domino bastante bien. Entonces, si ellos tenían dudas se los podía resolver rápidamente y eso hizo que me tomaran mucho más enserio.

Mi tutora también daba estas clases a los niños y niñas del 5ºB, pero con ellos pase poco tiempo, pues fue la tutoría de otra compañera que realizó las prácticas en este mismo colegio. De todas maneras, aunque pasaba poco tiempo con ellos, también les agarre mucho cariño. Pero debo destacar que ambas clases me ayudaron y enseñaron muchas cosas a lo largo de todos los meses que pase junto a ellos.